Ayer celebramos los 110 años de nuestra empresa.
Compartimos un momento muy especial con nuestro equipo, lleno de recuerdos, anécdotas y muchas risas. Conversamos sobre cómo han cambiado las cosas a lo largo del tiempo —no hace tanto escribíamos en máquina de escribir y enviábamos cartas por correo—, y hoy el WhatsApp y las vías digitales forman parte de nuestra rutina diaria.
Pero entre tanto cambio, hay algo que permanece: la esencia que nos une como familia y como empresa.
El 21 de octubre de 1915, Juan E. Zugasti fundó nuestra empresa con la convicción de que la confianza y la palabra dada son el mayor patrimonio. Ese fue el punto de partida de un camino que cinco generaciones después seguimos recorriendo con el mismo compromiso: BRINDAR RESPALDO, TRANQUILIDAD Y CONFIANZA a cada cliente.
A lo largo de los años, nos hemos adaptado a los nuevos tiempos y tecnologías, pero siempre cuidando algo que consideramos invaluable: el legado familiar.
Cuidar una historia de más de un siglo implica mucho más que continuar un negocio. Significa honrar los valores que nos transmitieron, mantener viva una forma de trabajar donde la responsabilidad y el respeto por las personas siguen estando en el centro Y SEGUIR CONSTRUYENDO sobre esas mismas bases, NUESTRA PROPIA HISTORIA en el presente. Porque cada generación aporta su mirada, sus desafíos y su forma de entender el mundo, pero el espíritu que nos guía sigue siendo el mismo.
En un mundo donde todo parece moverse con rapidez y lo efímero gana terreno, NOSOTROS SEGUIMOS CREYENDO EN EL VALOR DE LO QUE PERMANECE: las relaciones de confianza, el trabajo bien hecho y las raíces que nos recuerdan de dónde venimos.
Cada historia compartida, cada cliente que vuelve, cada familia que confía en nosotros forma parte de un legado que cuidamos con orgullo y gratitud.
Y también cada cliente que decide tomar otro camino nos deja un aprendizaje: nos impulsa a mejorar, a repensarnos y a seguir creciendo para ofrecer siempre nuestra mejor versión.
A cada persona, a cada proyecto que confió en nosotros, a cada familia, a cada generación que nos ha acompañado:
GRACIAS POR SER PARTE DE ESTA HISTORIA.
Con cariño,
El equipo de Zugasti Seguros,
Bajo la misma convicción que inspiró a Juan E. Zugasti en 1915.
